EL ROCK PROGRESIVO MALDITO

En 1979, por una serie de errores concatenados del aparato legal británico, en los que se contravienen varios artículos, el grupo al completo es acusado de alta traición y condenado a prisión, que cumplieron en la cárcel de Holloway. La duración de la pena fue distinta en cada caso. El disco que estaban terminando de mezclar en el momento de ser detenidos es utilizado como prueba judicial.

En 1993 se trasladan a vivir la localidad turística de Castro-Urdiales, donde continuarán de nuevo desarrollando todas sus actividades artísticas y musicales. La política de The Imperial Flea Circus, a partir de entonces, es pasar la mayor parte del tiempo allí, con esporádicas nuevas visitas a su país, al Reino Unido. En este período graban algunos de sus mejores discos y realizan algunos de sus mejores conciertos, en los que pasan revista a toda su carrera.

Aunque en los comienzos de su historia, fueron un grupo con una clara tendencia al directo, a medida que pasaron los años, los de Flea Circus comenzaron a disminuir el número de conciertos, y se fueron concentrando más en su desarrollo musical y compositivo: en crear. Destacan el éxito de las giras que dieron por el sur de Inglaterra en 1970 y en 1973, como promoción de los estrenos de sus discos: A Train About To Leave y An Egg Is An Egg Even In The Moon, respectivamente y su asistencia a festivales en Europa.  También trataron infructuosamente de implantar un festival nacional, así como de dar un concierto en Roma, dentro del monumental foro.

El apelativo banda maldita cobra su máxima expresión con The Imperial Flea Circus, ya que son varias las maldiciones de la banda:

A partir de 1998 todos los miembros de su formación clásica, paulatinamente fueron desapareciendo, uno a uno, sin dejar rastro. El líder en escena, Ian, desapareció a la salida de un cine; Mark durante un paseo por la campiña inglesa; Phoenix, el guitarrista, al norte de la India, junto al Ganges; Roger fue visto por última vez en un estudio de grabación; y Chris se fugó de un hospital psiquiátrico y no volvió a haber noticias suyas.

Por otro lado, ninguno de sus álbumes consiguió nunca llegar a las estanterías de las tiendas de discos. El máster de A Train About To Leave desapareció en su fiesta de presentación; el de An Egg Is Egg, Even In The Moon se magnetizó el metal de la cinta antes de ser publicada, y se borró la grabación; en Cinema el máster se quemó; el de In Town fue confiscado como prueba judicial; el de Primary Colours les fue arrebatado por el técnico de grabación; y los másteres de Fireboat y Experimental Twilight fueron robados. Sus dos restantes trabajos: Found Horizons y el último, Oral Sex, no fueron editados por decisión del grupo. Afortunadamente, los másteres no se perdieron de forma definitiva, y han podido ser recuperados. Re-editar digitalmente los trabajos de The Imperial Flea Circus, a fin de divulgar su música, es  el objetivo principal de este proyecto.

Pero en definitiva, Flea Circus es una banda maldita por no haber conseguido llevar la inspiración de su música al público. Aún hoy, en 2018, en el círculo de los que efectivamente, tuvimos buen contacto con los discos y con la información sobre la banda, siempre suele salir la inevitable suposición de qué hubiera ocurrido, si los trabajos discográficos de esta banda de rock progresivo hubieran tenido una difusión internacional. Pero evidentemente, tal ejercicio no hará sino alejarnos mucho de la realidad, e impedirnos ver cómo fue este gran grupo, tan imaginativo como desconocido.

La obra de The Imperial Flea Circus se adscribe al género del rock progresivo. El rock progresivo (también conocido como rock sinfónico, prog-rock) es una vertiente del rock que toma dirección hacia el desarrollo instrumental y vocal de las composiciones, y en la que se abandona la actual canción sencilla estándar y encaminada a la radio, o a las listas, o a las melodías populares, por   una concepción más elaborada de la música y de las letras, en la que se cuenta con todo tipo de estructuras e influencias que, en general,  se reflejan en temas que normalmente requieren de bastantes minutos, para ser desplegados. Incluso puede sólo decirse que el álbum (y no las canciones) es el rio por el que la música progresiva realiza su navegación, el artículo de su expresión. El disco como un todo vivo.

Sus orígenes son difusos: parece que hacia 1965 es utilizado el término por vez primera, y para el año 1968 la nueva tendencia ya está ampliamente implantada y llena de actividad. Pronto encontró su propio portal en los Estados Unidos, y en otros países: Alemania, Francia, Japón, México, Polonia, España… En el ocaso de aquella década, la fiebre se extendió hasta en el lado oriental del telón de acero. Surgió un rock progresivo ruso, rumano, checo,al lado del alemán, francés, holandés, español, belga… El telón de acero, derrotado nuevamente por el poder de la música.  Mención aparte merece el progresivo italiano por su gran desarrollo.

En su momento, una buena parte de los grandes grupos clásicos se aproximan al prog, propiciando que el género se viera enriquecido de su fusión con nuevos matices, efectos y cambios, y ganándose el favor de la opinión pública, el respeto de la crítica del momento, y experimentando un auge.

En la segunda mitad de la década de los años setenta del siglo pasado, la llegada del punk supuso un cambio en la actitud del público y, al punto,  hizo que el género progresivo viniera a menos, y experimentara una sesión de hibernación. Fue un momento duro para el progressive dream, un aviso importante: la caja de Pandora había sido abierta. Sin embargo, en los ochenta, volvería de la mano del neoprogresivo, en un verdadero post-surgimiento, que lo impulsaría a seguir adelante.

Dentro del rock progresivo existen muchos subgéneros, o estilos, pues muchos músicos se aproximaron a esta sección. Los principales son: el rock sinfónico, el rock espacial,  el metal progresivo, el art rock, el sonido Canterbury, el zeuhl, el avant garde, el rock electrónico, o el neo prog. Además el jazz rock suele ser un clásico estilo considerado como un género especialmente cercano.

A modo de ejemplo, algunos de los nombres de grandes grupos o artistas en solitario cuya música se enmarca en el subgénero progresivo son:

Alan Parsons Project,  Amon Düül,  Anekdoten,  Anglagard,  Ayreon,  Banco del Mutuo Soccorso, Camel,  Caravan,  Curved Air,  Dream Theater,  Eloy,  Emerson Lake & Palmer,  Focus,  Frank Zappa, Genesis,  Gentle Giant,  Gong,  Jethro Tull,  Kansas,  King Crimson,  Le Orme,  Magma,  Marillion,  Mastodon,  Mike Oldfield,  Moody Blues,  Opeth,  Pallas,  Pendragon,  Peter Gabriel,  Pink Floyd,  Porcupine Tree,  Premiata Forneria Marconi,  Renaissance,  Rick Wakeman, Robert Fripp,  Rush, Soft Machine,  Spock’s Beard,  Steven Wilson,  Supertramp,  Tangerine Dream,  The Mars Volta,  The Nice,  Tool,  Van der Graaf Generator,  Yes.

Esta lista, ni de lejos, pretende ser exhaustiva, pues hay que destacar que además de estas, hay muchísimas más bandas enmarcadas en el prog, que la podrían aumentar. Esto no pretende ser una enciclopedia. Muchos de ellos han escritos bellas páginas en la historia de la música y son aún muy influyentes, en su caso. Por supuesto, The Imperial Flea Circus es una buena muestra de lo que representa este estilo, y progresivos era un adjetivo que les gustaba escuchar.

Otros grupos o bandas diferentes que, aunque no se adscriben al rock progresivo, a veces tangencialmente han podido contagiarse de su influencia, son: The Beatles, The Beach Boys, The Pretty Things, Cream, Queen, Phil Collins, Procol Harum, Deep Purple, Led Zeppelin, Uriah Heep, Television,  Electric Light Orchestra, Jon Anderson, Vangelis, Ultravox, Asia, Moody Blues, The Bee Gees, Roxy Music, 10cc, Talking Heads,  Radiohead, o Muse. Aquí también está abierta la lista, desde luego. No hay que poner puertas al campo.

En cuanto a los estilos o géneros que, muchas veces, se han aproximado al nivel del prog están: el pop, el folk, la música para películas, la electrónica, el ambient, la disco music, la psicodelia, la new age,  o como no podría ser de otra manera, el heavy metal. En definitiva, los últimos versos del poemario progresivo, aún están por escribirse y, según creo, quizás sean especiales, como todo lo es en el progressive dream.

Soft Machine, Premiata Forneria Marconi, Jethro Tull, Rush, Pink Floyd, Genesis, Yes, Focus , Pentwater, The Nice, Camel, Popol Vuh, Kansas, Peter Gabriel, Marillion, Mike Portnoy, Dream Theater, Tool, Supertramp, Rick Wakeman, Electric Light Orchestra, Tony Iomy, y también el jazz, en general, o la new age music. Fuera del rock progresivo eran fans de James Taylor, y de Louis Armstrong. Dentro del panorama español les gustaban: Iceberg, Triana, Bloque, Crack y Gotic.

Algunas canciones de The Imperial Flea Circus se perdieron definitivamente antes de que se pudiera llevar a cabo su trabajo de digitalización y re masterización. Son cinco temas que fueron grabados entre 1971 y 1974, cuatro de ellos cantados, y el quinto instrumental. Sus títulos eran: Dark Fates, English World, Black Flower Sea Wave, y Lonely Warning. Sus títulos es todo lo que nos queda de ellas.

En esta página encontrarás toda la información posible sobre lo que The Imperial Flea Circus ha sido. Su contenido es lo único que nos queda sobre esta banda. Por tanto, compartir el legado de Flea Circus, y no meros datos,  es el simple propósito de esta web.

En la actualidad, después de todos estos años, es importante que el archivo de su música se divulgue, para que todos podamos complacernos con ella.

Participa del legado de Flea Circus que encontrarás en la página: disfruta de cada álbum que nos dejaron,  escucha sus canciones, divulga su progressive dream,  y cuenta por ahí su azarosa historia, pues con tus comentarios, ésta aún está viva, sí tú así lo deseas.

Por ello, te damos las gracias de antemano.

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